Según Rodríguez (2005), evaluación es aquel conjunto de procesos sistemáticos de recogida, análisis e interpretación de información válida y fiable, que en comparación con una referencia o criterio nos permita llegar a una decisión que favorezca la mejora del objeto evaluado". Por tanto, la evaluación continua del aprendizaje es esencial y resulta conveniente que se base en diferentes instrumentos que permitan apreciar el avance de cada estudiante en las actividades programadas.
En la educación a que se hace por medio de los recursos tecnológicos, se disminuye la posibilidad de contar con el lenguaje gestual, corporal, oral y la comunicación en tiempo real. Se centra en las actividades que el estudiante realiza y el profesor acompaña el proceso a partir de sus comentarios y observaciones escritas acerca del desempeño que observa, para consolidar o reorientar los logros.
Principios fundamentales de la evaluación del aprendizaje con recursos tecnológicos:
De la definición de evaluación se pueden extraer principios que subyacen al proceso evaluativo. Estos son:
Confiabilidad: La evaluación debe proporcionar la descripción exacta de las habilidades particulares a ser evaluadas.
Validez: Debe seleccionar métodos apropiados que respondan a los objetivos de aprendizaje, los contenidos (conceptos, procedimientos y actitudes), pero también a las características del estudiante, sus intereses, estilos de aprendizaje y criterios de evaluación.
Objetividad: Disminuir la intervención del componente subjetivo.
Autenticidad: La evaluación debe estar claramente alineada con áreas, los fines y los objetivos que se pretenden alcanzar y de acuerdo al nivel de las actividades de enseñanza aprendizaje formuladas.
Otro aspecto importante en la evaluación es que debe entrelazarse con la realidad del estudiante, para motivar y proporcionar elementos que proporcionen al estudiante una visión de su progreso. Para lograrlo, debe considerar el contexto del estudiante y facilitar la aplicación de los conocimientos en sus propios ambientes.
En términos generales, un proceso de evaluación tiene dos propósitos fundamentales:
Primero: facilitar el logro de los objetivos de aprendizaje.
Segundo: asegurar a la institución y a la sociedad el cumplimiento de los objetivos de aprendizaje.
El aprendizaje en la educación con recursos tecnológicos dispone de las siguientes prácticas:
Los profesores e instituciones pueden elegir entre una o varias formas de evaluar el aprendizaje. A la pregunta de cúal es la más indicada, se dan múltiples respuestas. Una de ellas, es que la selección de una u otra forma de evaluación depende los criterios curriculares, del diseño del curso y los objetivos trazados.
Las siguientes son algunas formas de evaluación que se utilizan:
- Aplicación de exámenes en forma presencial
- Aplicación de exámenes en forma virtual
- Asignación de trabajos
- Evaluación del desempeño en foros asincrónicos de comunicación
- Evaluación del desempeño a través de medios sincrónicos de comunicación
- Autoevaluación
- Coevaluación
Referencia
Lozano Rodríguez, A. & Burgos Aguilar, J. V. (2007) (Comp). Tecnología Educativa: en un modelo de educación a distancia centrado en la persona. Distrito Federal, México: Limusa. Capitulo 13